Sus ojos se confundían con su mirada, sus manos se confundían con su tacto, su boca se confundía con sus palabras, mi cuerpo tembloroso solo le respondía QUIERO SENTIRTE, no hubo espacio para el miedo, a ese bellaco lo dejamos atrás ese domingo de espantos, el idioma del silencio causó estragos y produjo una batalla intensa de besos
NADA ES MÁS DULCE QUE TENERTE A MI LADO
5 comentarios:
El silencio y su sabiduría, suaviza besos en sus batallas.
El silencio actúa ante la palabra muda, y lo hace bien.
Besos, niña.
Leí un post en lo de Afrodita, que cuenta que son amigas junto a Clementine.
La tres son redulces, debí imaginarlo.
Besos
adios a ese bellaco!. Me alegra... adelante la pasión.
Huyo de este blog también Mistress, aunque quizás lo último que he escrito sea lo mas sincero de mi lápiz lleno de realidades que muchos no comprenderían.
Mi vida pasa rondando escondites, ocultándome de muchedumbres heteropensantes, de personajes inválidos de comprensiones ajenas,
aunque siempre al final me muestre en los corazones simples.
Besos de mi otro yo.
El idioma del silencio es mágico...
y más cuando es ese silencio es roto sólo por una palabra :
"te amo".
¿no crees?
Publicar un comentario