Vidas que se apartan, caminos que divergen, vidas pasajeras, delirios constantes, ir más allá de lo predecible, vivir sin necesidad del tiempo, alcanzar por un instante aquello que aparece en mis sueños constatemente, teniendo la esperanza de que nunca más lo volveré a perder
domingo, septiembre 16, 2012
Autre Dimanche
Ya de verdad estoy cansada de pelear con estos días. Sé que al final uno de los dos terminará por cansarse, y sinceramente espero y creo que será él, yo soy más fuerte que esto.
sábado, septiembre 08, 2012
No sé restar
Nunca aprendí a restarle personas a mi vida, ni ahogar ilusiones en ríos de agua salada, ni dejar la esperanza en tiempos de sequía. La única resta que aprendí, fue restarle atención a mis inseguridades y a unos cuantos kilómetros de más. Fui creciendo en tierras blandas, en sentimientos reales, en sumas, en domingos que me arrancaron el alma, pero también me la enamoraron.
Nunca aprendí a restarle al cielo las estrellas de 5 puntas, ni las bombas que en el techo estuvieron colgadas dos noches. Tampoco le resté a mi diccionario cualquier palabra que estuviera contenida en una carta que el destinatario fuera mi nombre, y el remitente fuera mi nombre también, y menos aún restarle a youtube aquella lista que lleva tantos sentimientos entre video y video, nunca había tenido una lista de reproducción tan exquisita emocionalmente. Nunca le resté a mi cuento aquellos días en donde la mala medida de mis palabras terminaron causando un Te adoro no escuchado. Nunca vi como opción restarle esa sonrisa y esa mirada a mis días.
Sumé cada rincón, color, abcdario, pentagrama, y coctel,
Nunca aprendí a restarle al cielo las estrellas de 5 puntas, ni las bombas que en el techo estuvieron colgadas dos noches. Tampoco le resté a mi diccionario cualquier palabra que estuviera contenida en una carta que el destinatario fuera mi nombre, y el remitente fuera mi nombre también, y menos aún restarle a youtube aquella lista que lleva tantos sentimientos entre video y video, nunca había tenido una lista de reproducción tan exquisita emocionalmente. Nunca le resté a mi cuento aquellos días en donde la mala medida de mis palabras terminaron causando un Te adoro no escuchado. Nunca vi como opción restarle esa sonrisa y esa mirada a mis días.
Sumé cada rincón, color, abcdario, pentagrama, y coctel,
y la resta?
que se joda!!!
domingo, septiembre 02, 2012
Dimanche I
Parece que la neblina que me rodea se ha tragado mis palabras, ni una sílaba sale de aquí, sólo rebotan entre estas paredes que tienen encarcelada mi alma. Palabras usadas, sucias, pesadas, grises, son las que aparecen, las otras, las antónimas de éstas, no las encuentro, parece que se las comieron los domingos que ya no llevan tu nombre.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)